INACAP, mayo de 2022. Cuando se habla de robótica y de educación en la Región del Biobío, es casi imposible no asociar estos conceptos con el joven Óscar Iraira Morales quien, con tan sólo 25 años, ya lleva un camino andado en esta área, con diversos proyectos e iniciativas que asocian la formación de niños y jóvenes con el aprendizaje y uso de la tecnología. A lo que se suma que, recientemente, fue reconocido dentro de los 100 jóvenes líderes por El Mercurio y la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI).

Oriundo de Talcahuano, este estudiante de Ingeniería en Electrónica y Sistemas Inteligentes de INACAP Concepción-Talcahuano, ha hecho un camino en la enseñanza de la robótica. Cuenta que sus proyectos son parte de sus sueños, que desde su egreso del liceo lo han mantenido trabajando por impactar socialmente a través de la tecnología. "Sin saber nada, me atreví y conocí muchas personas que tenían el mismo interés", explica. “Siempre busqué la forma de realizar impacto y contribuir socialmente desde mi área. Logré liderar distintas actividades como monitor en programas de escuelas de emprendimiento e innovación social, así también liderando instancias en congresos para presentar la propuesta en torno a la robótica y educación”, subraya.

En el año 2018, junto a Francisco Véjar, crean el Instituto Robótica, con la idea de entregar mejores competencias y habilidades a los niños y jóvenes, para enfrentar los desafíos de la industria 4.0. “Se necesitan nuevas competencias, tanto técnicas como habilidades sociales en los grupos de trabajo, por ejemplo, y nuestra idea era entregar herramientas para que los mismos estudiantes fueran capaces de resolver problemáticas usando la tecnología”, señala.

Comenzaron a reunirse con establecimientos educacionales que quisieran tener estos programas formativos, un taller de robótica o bien usar robótica educativa en alguna asignatura e insertarla en el aula, entregando a los estudiantes nuevas experiencias, que los hicieran transitar de lo teórico a lo práctico con el uso de la tecnología.

Relata que en 2018 estuvieron en México presentando esta misma propuesta formativa. Durante el mismo año, expone en el Festival de Innovación Social (FIIS) en Santiago, respecto al impacto que genera la Robótica en la Educación.

Al año siguiente, Instituto Robótica empresa donde es co-fundador, fue seleccionada dentro de las mejores Startup de Latinoamérica por INCmty, el evento más grande de negocios y emprendimiento de Latinoamérica, en el Tecnológico de Monterrey, reconociendo a su empresa por el valor que agregan a la educación a través de sus programas. Por este mismo proyecto, en 2019 obtuvo un lugar –junto a otros once chilenos- en el Crucero del Gobierno Japonés, con 250 jóvenes de distintos países para seguir aprendiendo y avanzar en sus ideas, el objetivo de este crucero fue realizar redes de contacto y transferencia de conocimientos y experiencias que contribuyan al desarrollo de ideas innovadores y de impacto en los jóvenes entre los países participantes.

Hoy, junto a Véjar, continúa realizando actividades junto a colegios y liceos principalmente en Santiago y Concepción, bajo su mismo modelo, esperando aumentar el alcance en las regiones.

Recientemente, Iraira fue reconocido dentro de los 100 jóvenes líderes por El Mercurio y la UAI, como uno de los reconocidos por su contribución al desarrollo y futuro del país, y su capacidad de generar cambios en distintos ámbitos.

Óscar cuenta que, pese al valor de la robótica y el avance que ha logrado en el país, todavía es difícil la entrada de este tema a los colegios. Enfatiza en que “hay quienes no se atreven, pero muchos directivos y profesores son conscientes de lo que significa y el valor que agrega a los estudiantes tener habilidades digitales”. Invita a los jóvenes a que se atrevan a emprender, trabajar sus ideas y apostar por ellas. “De verdad se pueden cambiar vidas pensando en global y actuando en lo local”, recalca.